El sitio más leído y prestigioso de Argentina, Infobae, publicó una nota sobre los Baños de Bosque en Cariló.
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Y cuanto más gente se entera de los Baños de Bosque, más gente se acerca a practicar los Baños de Bosque, y no hago más que reconfirmar que hace bien, que es necesario este paseo en este tiempo, después de un año difícil y lleno de preocupación, miedos y vicisitudes.
Por esas cosas de la sincronía y la energía, la noticia también llevó gente a mi compañero Guía en Villa La Angostura, Juan Aubert. Me gustan esas cosas.
Cuando el trabajo que hacés tiene que ver con la mejora en la salud de las personas, mejora tu propia salud, mejoran tus vínculos, y se tejen redes amorosas y sincrónicas.
Así sucede con los participantes de cada Baño de Bosque. Convergen en una misma fecha personas desconocidas entre sí, algunas acompañadas por algún familiar o amigo, y entonces todo empieza a pasar. Porque pasan esas cosas en un baño de bosque: las relaciones que se crean en ese tiempo "como salido del tiempo" que es un Baño de Bosque son mágicas, sincrónicas, predestinadas, diría, sin pecar de exagerada.
Como si se tejiera una red solidaria y amorosa entre compañeros de paseo vengan de donde vengan. Y aportan uno al otro, milagrosamente diría, alimentándose unos a otros, destejiendo y tejiendo significados, resonancias de lo que cada uno vive en lo que vive el otro.
También suceden cosas en las parejas que vienen de a dos a tomar un Baño de Bosque. A veces piden estar solos juntos, a veces es el cupo de ese paseo. Y se redescubren sonidos de la pareja. Detalles tan pequeños de su día a día, hilos tan finos de su relación que en el Baño de Bosque surgen a la superficie. Porque es un Baño de Bosque una práctica sencilla pero de entramados de expresiones muy hondas que la naturaleza provoca.
Sólo la naturaleza las provoca. Como si la naturaleza te sacara lo bello, lo álmico, lo kármico, lo amoroso, lo confiado, lo perenne. Como una red de pesca, lo que la naturaleza saca a la luz es un secreto para cada participante.
El Guía sólo puede atestiguar esa canción secreta entre la naturaleza y la persona. Acompañarla, asegurarle el contexto para que suene.
El Guía de Baños de Bosque tiene la tarea de poner los instrumentos en ese cuarto a cielo abierto donde ocurre el encuentro del mundo natural y la persona. Y entonces empieza, más tarde o más temprano, a tocar la canción secreta de la naturaleza y vos. A veces tocan pocos instrumentos, como despacito, y con esos acordes la persona vuelve a su mundo cotidiano. Pero a esos acordes no los olvida más. Otras veces se producen enormes sinfonías secretas entre la naturaleza para vos. Rimbombantes y extasiadas. Tampoco las olvidas más.
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He oído decir que el baño de bosque es pasear en el bosque.
Luego de que hagas un Baño de Bosque verás que no es lo mismo. Y es de tremenda y hermosa responsabilidad poder facilitar esta práctica en mi país. Desde Cariló.
Bienvenidos.
Rocío Ferraro. Guía de Baños de Bosque por Forest Therapy Institute.
